Muchos días de reflexión quedan atrás, días difíciles por muchos motivos: personales, relacionados con la salud propia o de los nuestros, y profesionales.

Pero esos días de parálisis deben llegar a su fin. Debemos reactivarnos.

La crisis de la COVID-19 está haciendo mella en las empresas y, especialmente, en muchos autónomos y pequeñas empresas, que ven peligrar la continuidad de sus negocios. Por este motivo, ha llegado el momento de afrontar la incertidumbre y comenzar a actuar. Ha llegado el momento de reinventarse.

 

La situación de PYMES y autónomos durante la alarma sanitaria

Estamos en un momento especialmente complicado de gestionar. La COVID-19 ha provocado un estado de cosas inimaginable unos meses atrás, en el que nos encontramos unas dificultades totalmente novedosas.

En Marketing Gabinet, como consultores en acompañamiento a emprendedores, nos gustaría compartir con vosotros algunas reflexiones sobre la situación en la que se encuentran actualmente muchas PYMES y autónomos:

  • Impacto personal: nos estamos viendo afectados en términos de enfermedad o, al menos, en términos emocionales. Esta circunstancia está poniendo a prueba nuestras capacidades psicológicas.
  • Incertidumbre: nadie sabe qué va a pasar, ni cuándo, ni cómo, ni dónde. Esto puede generar miedo y abocarnos a la inacción.
  • Limitaciones: no podemos recurrir a nuestros recursos, habilidades y competencias habituales. Nos vemos obligados a renunciar a la potencia de lo presencial. Debemos trabajar desde casa, a la vez que compartimos espacio y tiempo de dedicación con nuestros hijos y con sus quehaceres escolares.
  • Grandes esfuerzos financieros: quien más y quien menos ha visto cómo los ingresos previstos se congelaban, mientras los costes se mantenían. Asistimos con impotencia al parón comercial de proyectos programados, en los que habíamos estado trabajando e invirtiendo, sin saber cuándo podremos retomarlos y monetizarlos.

Además, este es un momento de gestación de cambios, y ¡qué cambios! Por citar los primeros que se nos vienen a la cabeza:

  • La consolidación de lo telemático (teletrabajo, telegym, teformación, por citar algunos ejemplos).
  • El incremento del consumo desde el hogar.
  • El distanciamiento social y el consiguiente cambio en las relaciones comerciales.
  • La búsqueda de la seguridad por encima de todo.
  • La transformación digital para afrontar la limitación presencial.

Y esta situación provoca nuevas oportunidades y nuevas amenazas. Estamos comprobando la carencia de determinados bienes y servicios, lo que supone una clara oportunidad para que muchos orienten y definan sus negocios. Pero por otra parte, en otros ámbitos nos encontraremos con una excesiva oferta, que tendrá como consecuencia el fuerte incremento de la agresividad competitiva.

 

¿Cómo pueden las PYMES y autónomos reactivar su negocio durante el confinamiento?

Ha llegado el momento de iniciar un proceso de reflexión y reactivación, en el que será necesario replantear todas las estrategias corporativas que la empresa ha llevado a cabo hasta ahora.

Para empezar, debemos hacernos 3 preguntas que nos permitirán afrontar las 3 fases estratégicas que debemos recorrer en este proceso de reactivación:

  1. ¿Estamos en una situación de crisis? ASUMIR que, ante esta situación, debemos realizar algún tipo de actuación. No podemos quedarnos expectantes a verlas venir.
  2. ¿Cómo nos está afectando o nos va a afectar esta situación? EMPATIZAR para identificar las dificultades que nos estamos encontrando o nos vamos a encontrar, así como las nuevas circunstancias en las que nuestros clientes pueden precisar de nosotros.
  3. ¿Cómo podemos reorientarnos? MAPEAR o diseñar un plan de actuación acorde a las nuevas circunstancias.

 

Cómo pueden las PYMES y autónomos reactivar su negocio durante el confinamiento

 

Por todo lo comentado, nuestro principal mensaje es BE DESIGNER, MY FRIEND. Realizar un análisis y replantear nuestro modelo y características de negocio, nos colocará en una posición activa, adoptando la actitud adecuada para el proceso de reactivación de nuestro negocio.

Algunos consejos que pueden ayudarte a visibilizar tus dificultades y tus oportunidades:

  • Cuestiona todo y sé curioso:
    • No te dejes influir por lo obvio ni por lo que crees conocer.
    • Haz preguntas para entender qué necesita el cliente de ti y en qué puedes ayudarle realmente.
    • Pregúntate: «¿por qué?» todo el tiempo. Y el «porqué» de los «porqués».
    • Analiza a tu competencia: qué hace, qué tiempos maneja, en qué ámbitos está actuando. Su agilidad puede conllevar que tú te quedes atrás.
  • Encuentra patrones y reglas comunes sobre las que basar una propuesta de valor:
    • Trata de encontrar elementos y factores comunes sobre los que poder crear una propuesta comercial atractiva para tu mercado.
    • Busca temas interesantes que surjan de la interacción con los usuarios.
  • Diseña y genera propuestas para innovar y reorientar tu acción comercial, desarrollando un marketing alternativo.

 

La transformación digital: el gran reto para PYMES y autónomos

Para muchas empresas, abordar nuevos enfoques y nuevas formas de trabajar y actuar en el mercado requiere de un nuevo planteamiento tecnológico y de una transformación digital importante.

Estamos viendo cómo esta adaptación digital es ya una realidad. Las empresas se están viendo en la necesidad de potenciar sus medios habituales de comunicación, empleando más a fondo y de manera intensiva los medios digitales. Estas herramientas, que en muchos casos se habían considerado como meros canales informativos, en poco tiempo se han convertido en imprescindibles para ganar visibilidad.

Entre los retos de PYMES y autónomos en esta transformación digital, podemos citar:

  • El diseño o rediseño de sus entornos web.
  • El posicionamiento de estos entornos web en buscadores.
  • El lanzamiento de tiendas online y la adaptación de entornos webs corporativos al comercio electrónico.
  • La generación de contenidos para blog, web y redes sociales.
  • La publicidad online en Google Ads, LinkedIn, Facebook Ads e Instagram Ads.
  • La incorporación de pasarelas de pago virtuales.
  • La sistematización de la tematización de los procesos y fórmulas de ejecución de servicios, a los que las empresas y clientes ya se han habituado durante el confinamiento.
  • La incorporación de plataformas digitales para la prestación de servicios y actividades formativas.

En consecuencia, todo un conjunto de actuaciones para las cuales, las PYMES y autónomos se encuentran con obstáculos añadidos. La falta de conocimientos específicos, la necesidad de destinar recursos económicos para afrontar esta inversión o la dificultad de encontrar colaboradores que encajen en sus modelos serán algunos de los problemas con los que deberán enfrentarse.

Y es que, para afrontar esta transformación, en muchos casos se debe localizar y seleccionar colaboradores externos, especialistas en estas materias, con capacidades y experiencia el ámbito estratégico y de gestión del ámbito online. Todos los que nos dedicamos profesionalmente a estas labores estamos a vuestro lado. No dejéis de actuar por no conocer, pero, sobre todo, no hagáis sin saber por reducir vuestros costes. El éxito está en encontrar colaboradores que puedan encajar en el formato que tu negocio precisa.

 

El Plan de Comunicación en los procesos de transformación y reactivación comercial

Este nuevo panorama requiere de un Plan de Comunicación, que conecte con nuestros públicos, cuya principal característica será la omnicanalidad, es decir, la integración de todos los canales de comunicación existentes en el mercado, tanto online como offline.

Deberemos prestar especial atención al hecho de utilizar de canales diferentes para difundir un mismo mensaje. Algunas de las principales cuestiones a determinar en nuestro Plan de Comunicación serían:

  • ¿En qué canales nos vamos a apoyar para llegar a nuestro público?
  • ¿Cómo se va a transmitir la imagen de marca que se ha definido?
  • ¿Qué mensajes vamos a trasladar?

Nuestro Plan de Comunicación, además deberá ser multinivel, de modo que implique a empleados, clientes, proveedores, potenciales, prescriptores, etc.

Y por último, nuestro Plan de Comunicación deberá estar acompañado de un proceso de seguimiento y medición de los resultados obtenidos, controlando:

  • Grado de consecución de los objetivos planteados.
  • Seguimiento del posicionamiento buscado.
  • Análisis de la relevancia y la identidad obtenidas.
  • Seguimiento de la reputación.

No olvides nunca que, según los resultados que vayas consiguiendo, deberás pensar en nuevas actuaciones con aspectos mejorables que hayas detectado.